Después de algo más de dos meses, has vuelto hoy a mi casa. Ahora estoy yo siempre en la tuya. Todo ha cambiado tanto... Poco a poco vamos a tener que volver a dibujar los railes de nuestras vidas. Para mí ha sido hoy noche vieja. No nos veremos mañana. Como todas las fiestas, las quieres pasar en tu casa junto a tu padre y hermano. Bueno, por lo menos, va a ser la última vez que pasemos estas fiestas separados. Ojalá porque llevamos ya mucho tiempo prescindiendo de demasiadas cosas.
sábado, diciembre 30, 2006
viernes, diciembre 29, 2006
Mi coche
Por fin, después de casi tres meses, vuelvo a tener coche. Más que coche, es recuperar mi independencia. No depender de nadie para poder ir y volver de los sitios... no sé tu, pero yo lo necesitaba ya. Al final, 4000 €, menuda broma. Pero ha quedado bien, y parece que no voy a tener más problemas. Ojalá.
jueves, diciembre 28, 2006
Reuniones a tres
Dices que no, pero vamos al piso más que a estar nosotros, a reunirte con tu socio. Y lo entiendo, sé que no tenemos tiempo para nada y que ya que vamos, tienes que verle. Pero... ¿tu también me entiendes, verdad?
domingo, diciembre 24, 2006
Noche ¿Buena?
Al final he estado en tu casa. Todo es muy distinto, porque su ausencia es inmensa. Todo recuerda a navidades pasadas y a navidades futuras sin su presencia. Es muy duro. Al menos, al estat yo allí para vosotros ha estado un poco más distraido. Veremos como lo organizamos el año que viene.
sábado, diciembre 16, 2006
En casa
Nos hemos vuelto a quedar a dormir esta noche en el piso. No nos podemos ver en toda la semana, es normal que queramos estar tranquilamente juntos un rato, no? Hoy además, le hemos enseñado el piso a dos amigos más. Sé que hemos tenido mucha suerte. Ahora poco a poco ya iremos poniendolo a nuestro gusto.
sábado, diciembre 09, 2006
Y van nueve
Nueve años juntos. Y sé que vendrásn muchos más. Eso espero, porque ya "no sé si es que te quiero, o si es que ya me he acostumbrado demasiado a tí...".
viernes, diciembre 08, 2006
Primera Noche
En el suelo del comedor colocamos los dos colchones, los forramos con las sábanas y las mantas, encendemos la estufa y a soñar... Nuestra primera noche juntos en nuestro piso. ¿Algo mejor para celebrar la víspera de nuestro noveno aniversario? Y no nos acordamos de las velas, pero tampoco hicieron falta.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)