-Dime, ¿cómo me ves tú?
-Eres buena... aunque retorcida
Silencio
-Sólo eso soy para tí?
-Y callada, muy callada.
-¿Callada? Infinidad de pensamientos recorren mi cabeza a cada instante...
-Sí. Pero no los dices. Te callas.
-Será entonces que yo los oigo en mi cabeza...
Silencio.
-Lo eres TODO y me vuelves loco. Qué más puedo decir?
1 comentario:
La palabras nunca podrán expresar lo que sentimos en nuestro interior, solo son un pobre reflejo de nuestra riqueza.
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